Foto: Macnolete
Te diré cuánto te amo, mi princesa
en el silencio de nuestro espacio íntimo
al ritmo de acalorados latidos,
de roces de pieles y cabellos
de manos que toman lo que es nuestro
con cariño, con pasión, con anhelo.
Por ti, vendré con sorpresas, haré magia en tus sentidos,
regalaré variedad a tu vida
y más vida a nuestro encuentro
de cuerpos que se atraen
por la gravedad y el deseo.
Por ti, vida mía, ¿qué no haría?
como poeta, admirador y amante
si contigo soy y feliz a cada instante
y me inspiras más ternura cada día.
Bésame otra vez, encadéname en abrazos,
susurra con tu voz de fiel sirena
pues no quiero salirme de esos lazos
y así amarte, frente al mar, sobre la arena.
